La hipertensión se caracteriza por disfunción endotelial y rigidez arterial, lo que contribuye a enfermedades cardiovasculares ateroscleróticas. Este estudio muestra que los pacientes con hipertensión tienen niveles más bajos de NAD+ en sus células mononucleares de sangre periférica (PBMC) y aortas. El NAD+ desempeña un papel crucial en numerosos procesos biológicos y su disminución puede llevar a daño vascular y aumento de la presión arterial. Un hallazgo notable fue que la suplementación con mononucleótido de nicotinamida (NMN), un precursor del NAD+, redujo la presión arterial y disminuyó el daño vascular, tanto en pacientes hipertensos como en ratones.
El papel de CD38 y la inflamación en el agotamiento de NAD+
La CD38 endotelial, una enzima que degrada NAD+, está significativamente elevada en la hipertensión, en parte debido a la infiltración de macrófagos proinflamatorios que producen IL-1β. Esta vía inflamatoria activa la ruta de señalización JAK1-STAT1, lo que lleva a una mayor expresión de CD38 y una pérdida acelerada de NAD+ en las células endoteliales. Bloquear CD38, por ejemplo, mediante inhibidores de CD38 o mediante knockdown genético, mejoró la función vascular y redujo la presión arterial en ratones hipertensos. Estos hallazgos destacan que el agotamiento de NAD+ juega un papel importante en el desarrollo de la hipertensión.
Suplementación de NAD+ como estrategia innovadora para el control de la presión arterial
La suplementación de NAD+ con NMN puede ser una nueva terapia prometedora para el tratamiento de la hipertensión. Los resultados sugieren que la suplementación con NMN aumenta efectivamente los niveles de NAD+, reduce la presión arterial y mejora el daño vascular. Por lo tanto, el NMN podría desempeñar un papel importante en el control de la hipertensión y los riesgos cardiovasculares asociados, especialmente a la luz de su capacidad para mejorar la disfunción endotelial y restaurar el NAD+.
Ventajas de la suplementación con NMN para la hipertensión
- Reduce eficazmente la presión arterial
- Reduce el daño vascular y mejora la función vascular
- Aumenta los niveles de NAD+ en células sanguíneas y aortas
- Combate la disfunción endotelial, que es esencial en la hipertensión